Mr. Banker, la cresta y la camisa ultra estrecha
Mr. Banker, caminó decidido por en medio del salón, no pudo dejar de notar que era el centro de las miradas, él, hasta ayer un banquero de toda la vida, de los de traje y corbata, avanzaba ahora en su “nueva piel” – le gustó la frase de su consultor de cabecera Mr. Mac Key – no podía negar que se sentía incómodo usando esos pantalones cortos con camisa y pajarita, aunque estaba en buena forma, la camisa ultra estrecha era demasiado para su vientre que pugnaba por un poco más de espacio, los zapatos de esparto no eran nada cómodos, y ni qué decir del peinado con cresta; pero bueno era el coste de “digitalizarse” . Divisó la espalda de su compañera de toda la vida, la Sra. Cliente, que conversaba animadamente con aquel odioso Jovenzuelo Fintech, éste que había venido a ponerlo todo patas pa’ arriba , el culpable de que él llevara hoy la pajarita y la cresta, tocó el hombro de la Sra. Cliente, ella volteó y lo miró de arriba abajo, primero incrédula y luego espantada, Mr. Bank...